A día de hoy son ya miles y miles las personas que han tenido la oportunidad de ver el film de J.K. Álvarez. Lo que empezó siendo un proyecto modesto se ha convertido en un auténtico acontecimiento mediático del que todo el mundo se ha hecho eco. La película ha sido presentada en decenas de ciudades de la mano del equipo de la película, ha contado con la asistencia de personalidades de diferentes ámbitos y ha recibido una aprobación masiva de público y crítica. Salas llenas, aplausos de varios minutos y lágrimas de los asistentes han sido las constantes de estos casi tres meses en los que la película ha viajado por ciudades como Gijón, Oviedo o Madrid. Especial mención merece el estreno de la película en Luarca, localidad en la que está ambientado el film. J.K. Álvarez logró levantar a las casi 300 personas que acudieron al cierre de la película, en un acto cargado de emoción y de palabras para el recuerdo. Por otro lado, el director presentó la película en los cines Ideal de Madrid (foto), donde acudió la ministra de sanidad Leire Pajín. La ministra salió de la sala secándose las lágrimas, asegurado sentirse emocionada y sorprendida, y afirmando que El Cuento de Duna representa "una canto a la esperanza".
"J.K. Álvarez ha firmado su mejor guión y su mejor película. Un director que con tan sólo veintidós años ha logrado transmitir algo tan profundo que muy pocas personas serían capaces de conseguir. Se encuentra en la cresta de la ola." Son las palabras de Luis Miguel Rebustiello, productor de la cinta. Algunas de las claves del éxito de la película radican en la alta carga de emoción que desprende el guión, las extraordinarias interpretaciones de los dos actores protagonistas, Mar Lombardo y Paco Rojo, con permiso de la más que cuidada fotografía y una sobresaliente banda sonora. Una película completa que no tiene nada que envidiar a alguna de las más grandes producciones que se han estrenado últimamente, y que cuenta, por encima de todo, con un extraordinario apoyo y seguimiento de la sociedad.
El Cuento de Duna se ha convertido en una película para el recuerdo, un film del que se ha hablado y se seguirá hablando por mucho tiempo, y del que todavía queda mucho que esperar.
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